Esmeralda Santiago

     Escritora puertorriqueña. Aunque nacida en Puerto Rico, tuvo que trasladarse a los trece años junto a su madre y sus diez hermanos pequeños a Estados Unidos donde recibiría la mayor parte de su formación; de hecho no volvería a visitar a Puerto Rico hasta 1973. Tras estudiar en la Escuela de Artes de Interpretación de Nueva York donde se especializó en teatro y baile, ingresó a la Universidad de Harvard. Obtuvo después una Maestría de Letras en el Sarah Lawrence College obtuvo su doctorado en Trinity University. En 1994 escribe Cuando era puertorriqueña  en la que narra su infancia en Puerto Rico. Cuando era puertorriqueña es uno de los ejemplos vivos de la literatura de la diáspora. Además de su actividad dentro de la literatura puertorriqueña Esmeralda también ha resaltado en su activismo social, apoyando diferentes programas de apoyo social. 

     Cuando era puertorriqueña es una novela perteneciente a la tercera generación de la diáspora puertorriqueña y es una de las novelas mas leídas de la literatura nuyorican. La historia de una niña que en su infancia vive la vida de el modo jíbaro y obligada a cambiar totalmente su estilo de vida al tener que trasladarse a la ciudad de Nueva York, donde la novela explica una lucha de jerarquía entre judíos negros e italianos con los puertorriqueños. La historia desenlaza dentro de diferentes circunstancias que llegan a la realización de los sueños de la niña en donde es aceptada en la Academia De Artes de Nueva York. Esmeralda a través de su novela nos expresa los sentimientos oscuros y tristes, de extrañar lo que ya ella conocía. También se pueden resaltar los aspectos de lucha social entre razas marginadas por los blancos norteamericanos, esa lucha entre los que no son nada contra los que tienen el poder. Esmeralda dentro de su personaje principal nos presenta las ganas de triunfar en una tierra ajena a ellos de el renacer puertorriqueño en Nueva York. Como en todo escrito de diáspora se marcan las necesidades o el extrañar de las costumbres puertorriqueñas dentro de un ámbito hostil y marginador hacia lo puertorriqueño, pero sin jamás olvidarse que lo puertorriqueño era los que los mantenía unidos.

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